El uso de cadenas, cuerdas, cables u otros aditamentos similares para sujetar a los animales de compañía, tiene consecuencias en su salud y comportamiento.
Además de que no les permite moverse y desplazarse, les impide explorar, responder de manera adecuada al ambiente, evadir situaciones o estímulos negativos, socializar de forma adecuada.
Los impactos en su salud incluyen: pérdida de pelo, heridas que pueden inflamarse, lesiones en articulaciones, formación de callos y lesiones por contacto con superficies rígidas, estrés, problemas en su sistema inmunológico, problemas respiratorios, deshidratación, conjuntivitis, dermatitis y otitis por falta de higiene, crecimiento excesivo de uñas, disminución de la masa muscular, lesiones en columna vertebral, obesidad, diabetes y problemas cardiovasculares.
Los impactos en su estado mental y de comportamiento incluyen: frustración, ansiedad, depresión, hiperactividad, ladridos constantes, agresión, estereotipias, falta de socialización.